Manuel Belgrano, Héroe de la Fe
Familia Echevarría y los Símbolos Patrios.
Por Ricardo Eloraza Villamayor (*)

El 7 de Febrero de 1812, el Pueblo rosarino despertaba con la noticia esperada: En pocas horas unos 300 soldados y oficiales del glorioso Regimiento de Patricios arribaría a la entonces pequeña y tranquila Villa. La casona de la Familia Echevarría, ubicada sobre la actual calle Córdoba, en cruz con la Capilla de Nuestra Señora del Rosario, puertas adentro se preparaba para recibir al líder de la Revolución Continental iniciada a menos de 2 años: el General Manuel Belgrano, Jefe del Estado Mayor del Ejército Patriota.
El día anterior, el General Belgrano escribía en su Diario de Marcha:
DÍA 6 DE FEBRERO
“Nos hallamos campados á la inmediación del Arroyo Pabón ya referido, y son las ocho y tres quartos de la mañana; la tormenta que amenazaba descargó con grande huracán que nos echó por tierra algunas tiendas; la agua ha sido abundante y fuerte, y aún continua ella y el viento, bien que éste no se ha fijado y ha corrido todos los puntos de la aguja; esperamos que abonance un poco para emprender el paso del referido Arroyo lo más pronto que sea posible, es bastante barrancoso, y mayor la elevación de los terrenos en su Costa Norte; el terreno que pisamos es muy gredoso, y desigual. He contestado al Coronel del Regimiento de Caballería de la Patria…Son las 10 de la mañana, y recibo el papel del Capitán de la 54, Dn. Silvestre Álvarez, a que he contestado…; …el agua sigue, pero parece que el tiempo va a aclarar. En efecto, á las doce cambió el viento á la parte del Oeste y nos dio lugar para orearse las ropas, y poder seguir nuestro camino y verificamos el paso del Arroyo sin mayor trabajo, sin embargo de que es barrancoso y fangoso en sus orillas; continuamos por terrenos muy llanos hasta el Arroyo Seco, en donde campamos á las 9 de la noche á las inmediaciones de la Casa de Doña Marta Gómez, y otra cuyos pozos, aunque de agua bastante mala, nos sirvieron para refrigerar la sed; se dispuso quedasen los bueyes atados á las ruedas para marchar al salir la Luna, y sin más novedad, se tocó á silencio.
Santo
SANTA CATALINA Y RETIRO.
CONCORDIA
El mismo día de su arribo a Rosario, desde la madrugada, así redactaba el General Belgrano en su Diario de Marcha:
“DÍA 7 DE FEBRERO. A la una y media de la mañana se tocó generala y marchamos por caminos y campos muy llanos, sin dificultad alguna, y con poco trabajo que se hizo en la barranca de salida de una cañada que han formado las aguas de lluvia, y llaman Saladillo, pasaron muy bien las Carretas, y hallándonos á distancia del Rosario de cerca de una legua se formó la tropa, sacaron las banderas, y con todo órden seguimos hasta este Pueblo, cuyo Comandante Capitán Moreno y el Alcalde con otros vecinos salieron á recibirnos y ofrecérsenos. Llegados á la Plaza Mayor se formó en batalla, y habiéndose depositado las banderas en la Casa que me estaba preparado, marchó la tropa al campamento que ya estaba señalado por el Capitán Álvarez en una buena situación cerca del Rio, y bajo unos árboles que favorecen mucho por la estación en que nos hallamos. El Pueblo no tiene Casas ni galpones para colocar la gente; se ha encontrado una á propósito para parque de las municiones que traemos, y almacén de los vestuarios, y demás útiles del Regimiento. El Coronel y Oficiales de Caballería de la Patria, y el Capitán de Artillería Herrera, como igualmente el Capitán Rueda, encargado de la construcción de la batería, se me han presentado; he tenido mis conferencias con los dos últimos para la pronta conclusión de la obra en que me dicen se trabaja con bastante anhelo, sin embargo de la falta de gente, y lo que es peor del dinero; pienso esta tarde ir á verlo todo por mí mismo, á fin de tomar los conocimientos prácticos que se requieren…”
En ese entonces Rosario, ubicado en un paraje estratégico de la margen derecha del Paraná, se prestaba a erigir baterías artilladas para impedir incursiones de los realistas, adueñados del rio después del combate de San Nicolás. En este sentido el vocal de la Junta don Juan Hipólito Vieytes, luego de un viaje de reconocimiento realizado con ese propósito, recomendó las barrancas del Rosario como el lugar más apropiado para emplazar las defensas sobre el río.
La población estaba ubicada en tierras que en 1689 pertenecieron al capitán Romero de Pineda; sus herederos edificaron una modesta capilla, y en su derredor se construyeron las primeras casas. En los comienzos, al lugar lo llamaron Pago de los Arroyos que en 1730 se transformó en el Curato del mismo nombre. En la capilla, hecha de paja y barro, se veneraba la Virgen de Nuestra Señora del Rosario, por cuyo motivo poco a poco el pequeño poblado fue perdiendo su primitiva denominación, para ser conocido como lo es actualmente.
El capitán de Milicias de la zona de Rosario, don Pedro Moreno, fue reemplazado por Emeterio Celedonio Escalada, que había actuado en el Ejército Auxiliar de la Banda Oriental a órdenes del General Belgrano en Abril de 1811. Escalada asumió el 15 de febrero de 1812 la comandancia de la guarnición, formada por efectivos del Regimiento de Patricios y elementos del Regimiento de Caballería de la Patria.
Vale destacar que Celedonio Escalada provenía de la localidad de Mercedes, Banda Oriental, ciudad que junto a Jorge Fernández habían tomado el 28 de Febrero de 1811, luego del Grito de Asencio, nombre infundado dado por la historia oficial siendo la primera victoria de los Patriotas de aquella provincia del Río de la Plata.
“Soy muy amante de que todas las ciencias se sepan por principios y nadie pueda tener conocimiento de aquellas sin estar instruidos en éstos.”
Manuel del Corazón de Jesús Belgrano González
El General Belgrano había partido de Buenos Aires al frente del Regimiento de Patricios el 24 de Enero de 1812, y en su traslado a Rosario, de su puño y letra, fue relatando en el Diario de Marcha los acontecimientos día a día. Es interesante observar que el día anterior a su llegada a Rosario, en el santo y seña menciona a Santa Catalina, siendo que la casona de la familia donde habría de alojarse es residencia de la Señora Catalina Echevarría de Vidal quien fue luego la encargada de confeccionar las escarapelas y las Banderas creadas por Belgrano.
“No hay objeto más digno a la atención del hombre que la Felicidad de sus semejantes…” Manuel Belgrano, Inauguración del Consulado de Buenos Aires, 2 de Junio de 1794
LA CASA DE LA FAMILIA ECHEVARRÍA
Como relata el General Manuel Belgrano, al llegar a Rosario depositó las banderas de su Regimiento de Patricios “en la Casa que me estaba preparado”, que era la de su amigo, el Dr. Vicente Anastasio Echevarría, con quien en el mes de Octubre de 1811 habían firmado en calidad de representantes diplomáticos de la Junta Revolucionaria, el Tratado de Amistad y Federación en Asunción del Paraguay, provincia que se unió a sus hermanas del Río de la Plata a instancias del General Belgrano.
Desde su alojamiento, Belgrano envió 4 oficios al gobierno que tuvieron profunda resonancia y determinación en la avance de la Revolución
Veamos textualmente:
Oficio del 13 de Febrero de 1812:
“Parece llegado el caso de que V.E., se sirva declarar la escarapela que debemos usar, para que no se equivoque con la de nuestros enemigos y no haya ocasiones que puedan sernos de perjuicio, y como por otra parte, observo que hay Cuerpos de Ejército que la llevan diferente, de modo que casi sea una señal de división, cuyas sombras, si es posible deben alejarse, como V.E. sabe, me tomo la libertad de exigir de V.E. la declaratoria que antes expuse.
Dios guarde a V.E. muchos años. Rosario. 13 de Febrero de 1812
(firmado) MANUEL BELGRANO
Exmo. Gobierno de las Provincias del Río de la Plata”
Fuente: Archivo General de la Nación, Sala X, 44-8-29
RESPUESTA DEL GOBIERNO
El Gobierno Central, contesta la nota de Belgrano el 18 de Febrero de 1812, enviándole el siguiente oficio:
“En acuerdo de hoy se ha resuelto que desde esta fecha en adelante se haga, reconozca y use la Escarapela Nacional de las Provincias Unidas del Río de la Plata, declarándose por tal la de los colores blanco y azul celeste, y quedando abolida la roja con que antiguamente se distinguían.
Se comunica a V.S. para los efectos consiguientes a esta resolución.
Dios guarde a V.S. muchos años. Buenos Aires, Febrero 18 de 1812.”
Feliciano Antonio Chiclana, Manuel De Sarratea, Juan José Paso.
Bernardino Rivadavia, Secretario
Al Jefe del Estado Mayor”.
Fuente: Archivo General de la Nación, Sala X, 44-8-29
El General Manuel Belgrano recibe la comunicación el 23 de Febrero y el mismo día contesta con otra nota tan contundente como la del 13, reafirmando el verdadero sentido de la Revolución: “…Sostener la Independencia de la América”:
Oficio del 23 de Febrero:
“Se ha puesto en ejecución la orden de V.E. fecha 18 del corriente, para el uso de la escarapela nacional que se ha servido señalar, cuya determinación ha sido del mayor regocijo, y excitado los deseos de los verdaderos hijos de la Patria con otras declaraciones de V.E., que acaben de confirmar a nuestros enemigos de la firme resolución en que estamos de sostener la Independencia de la América”. Manuel Belgrano
*Ver pintura que representa el momento de entrega de Escarapelas a los vecinos y soldados
Insistimos: Belgrano aquí ya escribe al gobierno de “confirmar a nuestros enemigosde la firme resolución en que estamos de sostener la Independencia”, tema del que no hablaban las autoridades formales del gobierno. Es notable que la mayoría de los historiadores no mencionan ese parte de Belgrano a pesar de su trascendencia y aún hoy a 213 años parece que lo desconocen.
INAUGURACIÓN DE LAS BATERÍAS. CREACIÓN DE LA BANDERA
El 25 de Febrero Belgrano ordenó al Teniente Coronel Celedonio Escalada, invitar al vecindario de Rosario para las 5 de la tarde del 27, haciéndolo partícipe de las ceremonias de inauguración de las baterías: una sobre las barrancas de la margen occidental del Río Paraná a pocos metros de la Capilla, y la segunda batería en una de las islas de la margen oriental del mismo río, frente a la ciudad de Rosario, denominada Espinillo, en la actual Provincia de Entre Ríos, departamento municipal de Victoria. Siguiendo con los oficios de Belgrano al gobierno, veamos el del 26 de Febrero: “Las Banderas de nuestros enemigos son las que hasta ahora hemos usado, pero ya que V.E. ha determinado la Escarapela Nacional con que nos distinguimos de ellos y de todas las Naciones, me atrevo a decir a V.E. que también se distinguieran aquéllas y que en estas Baterías, no se viese tremolar sino las que V.E. designe. Abajo, Señor Excelentísimo, abajo esas señales exteriores que para nada nos han servido, y conque parece aún no hemos roto las cadenas de la esclavitud.” Manuel Belgrano
Fuente: Archivo General de la Nación, Sala X, 3-10-3
BELGRANO NO ESPERÓ LA RESPUESTA
Es muy evidente que Belgrano no estaba dispuesto a esperar la respuesta a su oficio del día 26, ya que el chasqui, demoraría 10 días en ir y volver de Buenos Aires, siendo que ya había instruido a Escalada el día anterior, 25, de invitar a la población a participar del acto del 27, a las 5 de la tarde. Las cartas estaban echadas: su actitud precipitó los acontecimientos que resultaron irreversibles.
BENDICIÓN Y ENARBOLAMIENTO DE LA PRIMER BANDERA PATRIA
1.- Batería Libertad
A la hora y fecha prevista, 5 de la tarde del 27 de Febrero, Belgrano ordenó la formación de las distintas divisiones del Regimiento de Patricios, que revistó montado en su caballo en presencia de los vecinos. Elevando su espada dijo:
“Soldados de la Patria. En este punto hemos tenido la gloria de vestir la Escarapela Nacional; en aquél, nuestras armas aumentarán sus glorias. Juremos vencer a nuestros enemigos interiores y exteriores y la América del Sud será el templo de la Independencia y de la Libertad.
En fe de que así lo juráis, decid conmigo ¡Viva la Patria!”
Fuente: Epistolario Belgraniano
La ceremonia se completó con la previa bendición de la Bandera Nacional por el Sacerdote Julián Navarro, párroco de la Capilla de Nuestra Señora del Rosario.
Batería Independencia
A continuación Belgrano dirigió una orden al oficial que estaba a cargo de inaugurar la Batería Independencia en la Isla Espinillo en la margen oriental del río Paraná:
“Señor capitán y tropa destinada por la primera vez a la batería Independencia: id, posesionaos de ella y cumplid el juramento que acabáis de hacer.” Fuente: Epistolario Belgraniano
INFORME DE LA CREACIÓN DE LA BANDERA AL GOBIERNO
Veamos cómo describe Belgrano estos acontecimientos en el parte enviado al gobierno:
“En este momento, que son las seis y media de la tarde, se ha hecho salva en la Batería de la Independencia y queda con la dotación competente para los tres cañones que se han colocado, las municiones y la guarnición.
He dispuesto para entusiasmar las tropas y a estos habitantes, que se formen todos aquéllos y les hablé en los términos de la copia que acompaño. (Ver texto, arriba, que comienza: Señor Capitán…)
Siendo preciso enarbolar Bandera y no teniéndola, la mandé hacer blanca y celeste, conforme a los colores de la Escarapela Nacional. Espero que sea de la aprobación de V.E.” Manuel Belgrano
Fuente: Epistolario Belgraniano. María Teresa Piragino
CONFECCIÓN y BENDICIÓN DE LOS SÍMBOLOS PATRIOS
María Catalina Echevarría de Vidal Confecciona las Primeras Banderas y Escarapelas
Solamente habían tenido conocimiento de las Banderas que se presentaron el 27 de Febrero de 1812 ante el pueblo y las tropas, la familia de su amigo el Dr. José Vicente Anastasio de Echevarría, en cuya vivienda residió Belgrano mientras estuvo en Rosario. La vivienda de los Echevarría estaba ubicada frente a la Plaza Mayor (actual Córdoba), y la Capilla sobre la actual calle Buenos Aires. Tengamos muy presente que Echevarría acompañó a Belgrano en misión diplomática a la ciudad de Nuestra Señora de la Asunción, provincia de Paraguay, siendo ambos redactores y firmantes del Tratado Federal del 12 de Octubre de 1811. Su hermana, la señora María Catalina de Echevarría de Vidal, fue la encargada de confeccionar las primeras Escarapelas repartidas a los soldados y habitantes de Rosario el 23 de Febrero y las Banderas Nacionales presentadas por Belgrano el 27 al inaugurar las baterías a las que denominó Independencia y Libertad
GENERAL EN JEFE DEL EJÉRCITO AUXILIAR DEL PERÚ
27 de Febrero de 1812
“Yo no sé más que hablar la verdad y expresarme con franqueza: esto me lo he propuesto desde el principio de la revolución y he seguido y seguiré así.” General Manuel Belgrano
Por extraña coincidencia, Belgrano recibió el mismo 27 de Febrero la designación de General en Jefe del Ejército Auxiliar del Perú que le enviara el gobierno.
Aquí, debo destacar que ese Ejército jamás se denominó “Ejército del Norte”, ya que tal nombre no existió en documento alguno. Se trata de uno más de los artilugios utilizados para manipular la interpretación de los hechos, adaptándolos a la ficción de la historia oficial que se desmorona cuando recurrimos a los documentos. Tengamos en cuenta que Belgrano nunca había escrito al gobierno que la inauguración de las baterías sería el día 27. Obviamente tampoco lo hizo en su oficio del día 26 cuando exigió determinar los colores de la Bandera.
Está a la vista que Belgrano inició esta maniobra de inteligencia el día 13, al escribir al gobierno de 3 -más un secretario muy influyente-, exigiendo la declaración de la Escarapela, ya que se valió de ese artilugio para luego el 27 presentar su creación de la Bandera utilizando los mismos colores que la Escarapela Nacional.
OBRA DE DIOS
“…no olvidéis jamás que nuestra obra es de Dios; que Él nos ha concedido esta Bandera, que nos manda la sostengamos, y que no hay una sola cosa que no nos empeñe a mantenerla con el honor y decoro que le corresponde…” Jujuy, 25 de Mayo de 1812. MANUEL BELGRANO
Canal 7 Jujuy 2017 Código https://youtu.be/2Mvp-Sxg5IY
Con estas palabras Belgrano se dirigió 3 meses después al pueblo jujeño y sus tropas desde los balcones del Cabildo, ya asumido General en Jefe del Ejército Auxiliar del Perú
Por su lado, el gobierno envió a otros jefes la declaración de la Escarapela Nacional, indicando los colores que debían usarse: “blanco y azul celeste”. (por ej. Martín de Pueyrredon que se negó y rechazó con fecha 26 de marzo de 1812 la Resolución del gobierno declarando la Escarapela) Por el contrario, Belgrano como vimos, ni bien recibida en Rosario la Resolución del Gobierno Central el 23 de Febrero, dispuso la entrega de la nueva divisa entre sus soldados y el Pueblo. Evidentemente, las escarapelas fueron confeccionadas anteriormente. Belgrano ese día 23 había obtenido el primer objetivo: Que sus colores fuesen sancionados oficialmente como hecho previo a su decisión de crear la Bandera. Se trataba de los mismos colores que las Escarapelas del 18 de Mayo de 1810, exhibidos por sus jóvenes partidarios veteranos de la guerra contra los ingleses en 1806 y 1807, frente al Fuerte y el Cabildo ante la sorpresa del virrey. Los mismos colores, blanco y azul celeste que representan a la Inmaculada Concepción de María –orden creada por Santa Beatriz en 1492 en Toledo, con la ayuda fundamental de su prima, la Reina Isabel La Católica; Belgrano al crear el Consulado había invocado la protección de la Virgen al crear en 1794 el Consulado de Buenos Aires. Por tal razón, las medallas que entregaba Belgrano a los alumnos egresados de las Escuelas de su creación: de Náutica y de Ingeniería y Dibujo, llevaban en el anverso los colores azul y blanco.
En síntesis, y reafirmando la idea central de esta nota, les dejo como corolario el título que completa esta demostración: ROSARIO NO SOLO ES LA CUNA DE LA BANDERA Y LA CONFIRMACIÓN DE LA ESCARAPELA, SINO TAMBIÉN CUNA DE LA INDEPENDENCIA DE HECHO.
Esta afirmación está explícita en las palabras que el General Belgrano expresó ese mismo día ante el Pueblo Rosarino y sus tropas:
“Soldados de la Patria. En este punto hemos tenido la gloria de vestir la Escarapela Nacional; en aquél, nuestras armas aumentarán sus glorias. Juremos vencer a nuestros enemigos interiores y exteriores y la América del Sud será el templo de la Independencia y de la Libertad…”
General Manuel del Corazón de Jesús Belgrano, 27 de Febrero de 1812
PADRE PEPE JOSÉ MARÍA DI PAOLA
“…En este Bicentenario, -lo que hablamos más de una vez con el amigo Ricardo- nos encontramos ante un hombre de Fe ejemplar en la Historia Argentina…que tranquilamente en otros tiempos podría estar en los altares de la Iglesia…”
Primer Congreso Nacional El Camino de Belgrano Héroe de la Fe Buenos Aires, 21 de Noviembre de 2014
https://youtu.be/gAfM0V3OsMM (Código Youtube audiovisual)
PADRE GUILLERMO FURLONG
“Hemos querido presentar ahora a los argentinos el cabal arquetipo de santidad, que hallamos en la persona y en la actuación de Manuel Belgrano, para que la juventud argentina no crea, que la santidad es algo circunscripto a los conventos o monasterios, o algo inalcanzable para los laicos…Ofrecemos el caso concreto de quien vivió entre nosotros, ocupó altos cargos públicos, tanto políticos y económicos como civiles y militares y que fue un santo en el sentido más cabal de este vocablo”.
El Santo de la Espada y de la Pluma
Asociación Cultural Noel y Club de Lectores – Buenos Aires, páginas 5 y 51
(*) Presidente Instituto Nacional Manuel Belgrano